Natsuyuki Rendez-vous 7
Debo comenzar diciendo que este capítulo me gusto de la manera más extraña posible. Fue definitivamente algo dramático a su manera (especialmente la escena final) y da pistas que resultan importantes para el posterior desenvolvimiento de la trama. Especialmente, y como ya venía sospechando, esa extraña maseta se volverá importante de ahora en adelante. Después de todo, la imagen del niño replantando su contenido al final del Opening ya daba ciertas pistas.
Y bueno…que puedo decir. Lo que ha ocurrido en este episodio ha sido algo perturbador para mí. Después de todo, pasó lo que debía pasar entre Hazuki y Rokka, pero como ya había mencionado, esta cita y su posterior desenvolvimiento se han dado esencialmente con Shimao. No es Hazuki con quien Rokka ha pasado la tarde, y este hecho ya me venía preocupando desde hacía ya un tiempo. El sufrimiento que debe sentir Shimao ante esta situación debe ser devastador—tan frustrante. Y de esta manera, el expresa su egoísmo, el de no querer perder a la mujer que más amó cuando estaba vivo, y que definitivamente sigue amando.
“No se la quiero dejar a nadie”
Por otro lado, Hazuki sigue atrapado en las páginas del blog de dibujos de Shimao, con una Rokka en versión más joven. Tal vez la pregunta que más me impacto de este episodio fue “La cuestión es ¿quién es el protagonista de la historia?” –me dejó pensando. Además que se deja entrever una “simpatía” mutua entre ambos personajes masculinos. Shimao no puede odiar a Hazuki, después de todo considera que no es una mala persona, y Hazuki…bueno en definitiva debe haberle agarrado cierto “¿cariño?” al alma de Shimao.
La cita de Rokka, en definitiva, fue más éxito que la anterior. Pero… ¿nadie más pensó que Rokka lleva las cosas demasiado rápido? En cierto sentido creo que Rokka todavía no sabe que quiere, por lo que apresura las cosas y actúa para no pensarlo dos veces y arrepentirse después. Inconscientemente creo que busca olvidarse de Shimao, pero sin éxito. Lo que ocasiona que esta se enfrente a situaciones, que ella mismas desencadena, que terminan lastimando a otras personas y a ella misma. Mientras que, todavía no puedo advertir bien lo que trama Shimao. Es más creo que ni el mismo lo sabe.
Me gusto mucho la memoria de cuando Shimao y Rokka salen por primera vez e intercambian números telefónicos. Es un recuerdo de Shimao, por lo que los sentimientos que son narradas en esta representación definitivamente fueron de mi agrado.
Y ni que decir de la última escena. Fue emotiva. Rokka, llegando a la tienda, viendo la imagen de Shimao desvanecerse y encontrando muchos arreglos florales que en definitiva son obra de Shimao. Una escena que rompe a cualquiera.
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