Gatchaman Crowds

La historia de Gatchaman Crowds se sitúa en Japón durante el verano de 2015. 180.000 personas viven en la ciudad de Tachikawa, la segunda gran metrópolis del área de Tokio. Entre sus habitantes se encuentran los Gatchaman, guerreros que visten trajes blindados cuya fuente de energía es el “Note”, la manifestación de los poderes espirituales que residen en las criaturas vivas. En este contexto, un concilio se encarga de seleccionar a aquellas personas con poderes latentes para asignarles la misión de proteger la Tierra de criminales alienígenas, reclutando desde hace varios años a los guerreros Gatchaman para que hagan frente a una misteriosa entidad conocida como “Mess”.

Muchos de ustedes tal vez no tengan ni la más mínima idea de quiénes eran los Gatchaman originales. A aquellos que como yo, con unos años más encima, que se acuerdan de aquellos #hombrespájaro es obvio el porqué la curiosidad caló mi ser cuando Gatchaman Crowds fue anunciado. Aparte de apelativa animación, con colores y diseños vivos e interesantes para la vista (mi vista), Gatchaman llegó a la temporada de verano para posicionarse como ese anime extraño en todos los sentidos de la palabra. Gatchaman no era lo que esperaba, teniendo en su título la reminiscencia de mi niñez temprana y el hecho de que no esperaba nada nuevo de este anime #SinceridadAnteTodo.  Sin embargo, Gatchaman llegó a ser una inesperada obra que terminó haciéndome pasar grandes momentos. De la mano de Kenji Nakamura, también conocido por animes como Mononoke y Tsuritama, conjuntamente con la productora Tatsunoko Productions, viene a nosotros una historia original que nos remitirá un poco (una pizca) a nuestra antigua serie de los años 70’, Gatchaman, o mejor conocida por “Fuerza G”.

Muy a pesar de que no encontraremos a nuestro antiguos héroes, es innegable que este anime nos proveerá de una historia refrescante la cual trae a colación varios temas interesantes en la era en la que vivimos, la llamada era de las “redes sociales”. Con unos colores asombrosos, una historia fresca aunque con un ritmo y lógica difícil de seguir, personajes que a decir verdades no me sorprendería que te animaran abandonar la serie en los primeros capítulos (Sí, lo digo por ti Hajime), buenas ideas que no terminaron de ser explotadas a su plenitud, y un OST #superb, llega Gatchaman para entretener nuestro días. Con un potencial tremendo que no logró aprovechar al máximo, una gran cantidad de buenos temas que no lograron encajar y cuajar del todo, considero que no recomendaría Gatchaman a todo el mundo, después de todo, a mí misma me atrapó cuando ya iba por la mitad, dejándome con una gran sonrisa por varios capítulos cuando el gran climax llegó….hasta que vi el final quedé algo desconcertada c:

De la mano de un estudio como Tatsunoko Porductions, también conocida por obras como SKET Dance o Macross, Gatchaman llega para traernos una animación de calidad que hará que sea placentero para nuestros ojos el poder ver cada capítulo. No solo creo que la animación de los personajes y los paisajes han sido lindos, sino que voy a hacer una gran mención a las transformaciones de cada uno de nuestros héroes y sus trajes #badass que destilaban modernidad. Diseños que lograron hacerme abrir los ojos de sorpresa debido a lo bien construidos que me parecieron y a lo disímiles que eran de la referencia original (solo el símbolo era similar). De esta manera, las escenas de batalla fueron sumamente complacientes para mí gusto, logrando emocionarme y hacerme querer ver más transformaciones de las que mostraron. Atrapante es la palabra que usaría para describir el apartado visual de un anime como Gatchaman, y la cual acompañó muy bien la ya extraña esencia de este show.

La historia comienza de una manera sencilla y cotidiana en este tipo de animes. La protagonista es elegida para proteger a la humanidad de extrañas criaturas extraterrestres, concediéndole así una serie de poderes—entre ellas una transformación #waytoodamngood—que la consagrará como nuevo miembro de un grupo secreto de justicieros llamado Gatchaman. Hasta aquí, el anime parece ir por el formato estándar hasta que….tuntuntuntun nos revelan la existencia de dos travestis que introducirán un elemento nuevo que hará de Gatchaman algo más interesante: El Galax, una red social que tiene a todo Japón enganchado. De esta manera, esta red conecta a todas las personas a través de su teléfono celular, siendo su objetivo la ayuda mutua entre sus miembros. Gatchaman trae así a colación una la idealizada idea un gobierno en conjunto (democracia total) y la creación de un mejor lugar que se podría lograr de la mano de las redes sociales, en este caso del Galax. ¿Las personas y la sociedad están preparadas para esto? Nuestro malo travestí se encargará de hacernos dudar de esto por varios capítulos, corrompiendo esta red y haciéndonos ver también la destrucción que puede llegar a causar.

Si bien la historia encierra varios elementos interesantes creo que finalmente no logra establecer el equilibrio entre la del Galax y de los Gatchaman, dejando a los últimos relegados y sin mucha razón de ser. Una serie que tal vez tuvo la intención de meter varios elementos, obviamente interesantes, pero que no logró cuajar ninguno de una manera sólida y concisa. Una pena, considerando su gran potencial. De esta forma, el final deja varias preguntas sin resolver y algunos elementos sin un cierre que englobe a una historia que probablemente no continúe, dejándonos con un sabor medio agridulce.

Los personajes son tal vez el punto débil de este anime desde mi punto de vista, siendo bastante estáticos. No esperen ver grandes evoluciones de cada uno de ellos, y mucho menos conocer de ellos a profundada. Creo que el que uno decida seguir este anime tiene mucho que ver en cómo logre empatizar con algunos personajes, pues no es secreto Hajime puede causar dos sentimientos opuestos, o la odias o la amas (yo la odie a decir verdad). Es después de todo un personaje que es de los más estáticos en este show. Es aquella chica alegre y a primera vista tonta (es la tipificación de la chica ¡GENKI!), que llega al grupo para cambiarlo de raíz y hacer de ellos verdaderos héroes. Sin embargo ¿qué tanto sabemos de Hajime? ¿Qué tan profundo fue su personaje o qué tanta evolución demostró? La chica era casi perfecta, ni el mismo Mamoru-travestí-con-nombre-extraño, se oponía a ella completamente. Cada uno de los demás integrantes de la pandilla G, si bien tiene problemas que enfrentar, y los cuales finalmente son afrontados gracias a la existencia de Hajime, en sí no encarnan personajes memorables o sumamente profundos. Y a pesar, de que nuestro antagonista es un buen personaje, finalmente nunca entendí muy bien su esencia. Algo así me pasó con cada uno de los personajes, no comprender quienes eran, porqué peleaban, sus historias, sus sueños, sus metas, tal vez me hizo muy indiferente a lo que les pasara, SIENDO ESTO UNA PENA.

«Gatchamaaaannn~~»  tuntuntun «Gatchamaaaannn~~» Vamos, no me da vergüenza admitir que me tenían cantando conjuntamente con el soundtrack cuando los «Gatchamaaaannn~~»  aparecían. El OST me ha parecido de gran calidad, creando el ambiente adecuado para la esencia del anime. Los themes han sido también un gran logro, ambos han sido bajados a mi Ipod sin pensármelo dos veces. «Crowds» de WHITE ASH y «INNOCENT NOTE», cantado por nada más y nada menos que Hajime Ichinose (Maaya Uchida), han sido una revelación increíble. Y aunque crean que hago esto porque amo locamente a Mamoru Miyano, con este personaje no puedo evitar dejar de sorprenderme con cada novedad con la que nos sale, lo multifacético que es este seiyuu, es algo que nunca va a terminar de asombrarme. Me imagino que se debe haber divertido mucho haciendo al malo travesti, Berg Katze. Y como no mencionar a Maaya Uchida, que puede hacer una voz tan estresante como la de Hajime y al mismo tiempo cantar la gloriosa canción del ED. El OST, definitivamente uno de los mejores de la temporada.