Ballroom e Youkoso

La historia de Ballroom e Youkoso se centra en el estudiante Tatara Fujita, que quiere ser bueno en algo, en cualquier cosa. Por desgracia, es tan mediocre como cualquier otro adolescente. Los matones del barrio lo saben y por eso aprovechan cualquier ocasión para sacarle dinero, pero esto cambia cuando el caballeroso Kaname Sengoku se encuentra  ellos y los echa. Sengoku resulta ser un bailarín de salón profesional y una vez que Tatara Fujita termina metido en el mundo de los bailes de salón, su vida nunca volverá a ser la misma.

Production I.G | Manga | Shounen | Deporte, Drama, Romance, Comedia

Típico. Esa es la palabra que he escuchado para describir lo que uno siente cuando está viendo Ballroom e Youkosou (Bienvenido a la pista de baile). Y creo que es correcto, pues es un anime que apela perfectamente a lo que es la esencia de un shounen deportivo. En este sentido, ha seguido el guión pre-establecido en esta clase de género a la perfección. Así, el protagonista (un chico al principio sin gracia pero con grandes dosis de perseverancia, disciplina y optimismo) en estos dos capítulos va a encontrar:

• Un sueño que seguir ☑
• Su futuro rival ☑
• Su posible futuro interés romántico ☑
• Su maestro y persona que admira ☑
• Que, increíblemente, tiene una habilidad especial que con esfuerzo lo podrá llevar a ser el mejor en el deporte en el que practica ☑

Asimismo, ya tenemos planteada una introducción típica que además tiene la bendición de estar acompañada por una producción más que decente, a cargo de un staff de Production I.G (estudio que sabemos tiene al shounen deportivo más que estudiado luego de sus grandes éxitos Kuroko no Basket y Haikyuu!!). Mi pregunta y reflexión con respecto a este anime es ¿Ser típico o hasta cliché es necesariamente algo malo? Y lo pregunto porque hace mucho tiempo que vengo sintiendo que la connotación negativa envuelve a esta palabra y, personalmente, creo que no debería ser así.

Creo en el disfrute real de lo típico cuando está correctamente presentado y creo que es una bendición que todavía pueda sentirme así luego de años. No voy a negar que el tiempo que llevo en la industria ha matado mi factor sorpresa y que, también, ha influido en que tenga altas expectativas para con aquello que pretenda sacarme de esta zona de #meh en la que he caído. Ya poco logra realmente sorprenderme o tentar puestos en lo alto de mi ranking personal. No obstante, todavía disfruto de ver anime como pasatiempo y eso me parece dentro de todo importante (y el factor principal por el cual sigo teniendo este blog).

Al anime entran cada día nuevas personas, pues es una industria dinámica, y lo que para nosotros (gente que ya lleva algunos años en este mundillo) puede ser ya una trama reciclada, par a muchos puede ser una verdadera sorpresa. ¿No fueron algunas de estas fórmulas las que nos metieron a algunos animes y géneros? Por ello, siento que es tan importante poder de vez en cuando traer a colación las famosas fórmulas del éxito que hacen a muchos géneros lo que son. Inclusive, el poder traer la fórmula a colación y ejecutarla bien me parece también un logro interesante. Después de todo, luego de años en el género spokon, por ejemplo, muchos fracasan en la aplicación de la misma.

Me gusta la siempre buena vibra y deseo de superación que el spokon destila. Me gustan los torneos, me gusta ver a los personajes mostrar en ellos aquello por lo que han practicado. Me gusta apoyarlos, porque luego de haber visto su historia mi corazón no hace más que desearles el bien. Sufro cuando fracasan, me alegro cuando progresan. Me gusta que el deporte pueda traer a sus vidas nuevas experiencias y personas. La fórmula general puede ser la misma para todos ellos pero fue esta la que en un primer lugar me ganó.

Así, en líneas generales, Ballroom e Youkoso es el típico shounen que llega a nosotros cada cierto tiempo. Un protagonista que descubre su pasión por este género deportivo y que, pese a todas las dificultades que le ponga la vida, va a luchar por alcanzar su nuevo sueño. Hará amigos, rivales y amores en el camino, tendrá triunfos pero también grandes derrotas. Y, aun así, seguirá en pie para «Ser el/la mejor».  Con la ayuda de un equipo de animadores y productores que ya saben cómo manejar este tipo de argumentos, es un anime que se ha hecho para disfrutar.

Probablemente no revolucionará mi mundo o será mi nuevo anime favorito de todos los tiempos; no obstante, será ese anime que me entretenga cada domingo y que me recuerde por qué me gusta el spokon y por qué uno de mis hobbies es el anime. No se lo recomiendo a los que no gustan del género porque es su tipificación. Sin embargo, si eres como yo, amante del spokon y sus clichés, solo me queda decir «Bienvenido a la pista de baile»

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