Beck: Mongolian Chop Squad | Reseña Anime
Beck: Mongolian Chop Squad
Koyuki es un chico japonés de 14 años que entra en la escuela secundaria con dos amigos de la infancia. El primero es Tanabe, el típico pervertido que no puede pensar más que en mujeres y que siempre está intentando fotografiar a las chicas en poses «comprometedoras», y el segundo es una atractiva estudiante llamada Izumi, era casi la única chica con la que se llevaba bien cuando era pequeño. La aburrida vida de Koyuki cambia cuando salva a un perro de extraña apariencia de unos niños que le querían dar una paliza. El dueño de Beck (el perro) resulta ser un guitarrista, Minami Ryuusuke. Los dos se hacen amigos y así comienza su divertida, loca, y a veces peligrosa aventura musical. (Wikipedia)
- Tipo: Serie TV
- Año: 2004-2005
- Episodios: 26
- Duración: 25min x ep
- Estudio: Madhouse
- Original: Manga
- Demografía: Shounen
- Géneros: Drama, Música, Slife of Life
- Rating: R – 17+
BECK: Mongolian Shop Squad evoca un postulado sencillo: Adolescentes encontrándose a sí mismos en la música y configurando una banda de rock con el sueño de ser profesionales exitosos en aquel campo. Así, nuestro protagonista es un chico de 14 años llamado Koyuki que no tiene grandes aspiraciones o sueños. Luego de ayudar a salvar a un extraño perro de las manos de unos niños que lo hostigaban, Koyuki conocerá al dueño del can, Ryuusuke, un guitarrista prodigio que lo llevará a descubrir el fascinante mundo del rock. El objetivo de Ryuusuke es crear una banda que llegue a ser exitosa, no solo en Japón, sino también internacionalmente. Por ello se encuentra en búsqueda de miembros talentosos que lo ayuden a lograr su sueño. Koyuki, con arduo esfuerzo, formará poco a poco parte de este objetivo.
La historia, configura una narración del camino a la adultez contada desde una cotidianidad que transpira honestidad. El camino para lograr el éxito en una industria como la musical es lento, y aquello es lo que el director y compositor Osamu Kobayashi [Paradise Kiss] logra rescatar en esta narración audiovisual. El espectador puede ver cómo el protagonista se inserta poco a poco en este mundo del rock, cómo aprende sobre bandas, cantantes o géneros, cómo desarrolla poco a poco un gusto por este tipo de música que le es totalmente ajena, cómo se adentra así en el mundo del rock underground, cómo aprende a tocar la guitarra y cómo finalmente se inserta en la banda que su mentor y amigo Ryuusuke crea.
Y es justamente este ritmo lento y hasta melancólico, aquello que hace a Beck un anime tan especial. Alejado de la atmósfera colorida y radiante de sus congéneres escolares, en donde formar una banda y dominar instrumentos en la secundaria parece una jornada llena de azúcar flores y muchos colores; Beck nos muestra lo agridulce de la adolescencia y del mundo musical. Es un anime introspectivo y honesto, el cual logra hacerse, hasta cierto, punto real. Así, el vínculo que forma con el espectador, el cual sigue la historia de Koyuki, logra hacerse más y más fuerte conforme pasan los capítulos. En este sentido, saber si BECK logra el éxito se vuelve una necesidad para el espectador, quien queda pegado a la pantalla; siguiendo el sueño de Koyuki como si fuese el propio.
Si bien el centro de la narración fluye con respecto a las vivencias de Koyuki y en gran medida conocemos a los demás personajes conforme él mismo va interactuando con ellos, un punto agradable es la química que logra haber entre la banda. Y aquello es parte importante también de la narrativa, pues vemos cómo personas tan disimiles logran conformar una célula musical competente poco a poco. Ryuusuke es un prodigio de la guitarra, quien introduce a Koyuki a la música rock y quien es el motor del sueño de crear una banda exitosa. Taiga se une poco después a pedido de Ryuusuke como el talentoso bajista calmo pero enigmático, el cual solo busca una banda con un buen vocalista. Chiba, un alocado rapero termina, luego de idas y venidas, también en la banda como vocalista. Finalmente, luego de la inserción de Koyuki en la dinámica, se unirá su amigo Saku como baterista. Momentos buenos y malos acompañan a la banda, y aquello es lo que la hace entretenida de seguir. Sin olvidar mencionar arcos que involucran enfrentamientos con bandas rivales o los problemas románticos de Koyuki con Maho.
La animación, con colores opacos y diseño simple pero atractivo, acompañan bien una historia de corte, por decirlo de alguna manera, independiente como lo es BECK. No es un anime que se luzca por sus elaborados trazos y diseños, pero tiene un encanto especial que resalta la esencia de la producción: Los personajes no resaltan en diseño pero logran tener personalidad, los fondos logran capturar bastante bien el mundo underground de las nuevas bandas de rock, y se tienen los mejores aciertos en la animación de los conciertos y el manejo de los instrumentos musicales. Desde el apartado musical, como un anime cuyo centro es efectivamente la música, hay que precisar que el OST, el cual está compuesto principalmente por lo temas de la banda, logran ganarse al público poco a poco. Temas como Moon on the water, Follow Me, Face o hasta Brainstorm terminan siendo cantados por el espectador con satisfacción porque son la esencia de la banda de protagonistas.
Si bien hay arcos y subtramas que descolocan (como la historia final de «Lucille»), la calidad de la animación no es homogénea, a veces el drama de Koyuki resulta «un peu trop«, el ritmo puede ser lento para muchos o que se tiene finalmente que ir al manga para saber más sobre el desenlace de los protagonistas; si eres amante del rock (y de la música en general) y quieres ver una historia sobre la conformación de una banda que lucha por volverse exitosa en la industria, Beck definitivamente es para ti. De ritmo acompasado, atmósfera melancólica, personajes que se sienten reales, Beck es un anime que se deja disfrutar. Ver el esfuerzo del protagonista por aprender a tocar un instrumento, lo que significa conformar una banda, la energía y sacrificios que implica lograr que tus canciones triunfen. Un anime no tan conocido pero que vale la pena ser recomendado.
Hace añares que conozco Beck y la verdad que nunca la terminé. Por gil, nomás, jajaja. Es interesante. Incluso había comenzado con el manga, pero me pasó lo mismo. Tengo que retomar ambos en algún momento.
Recuerdo que en aquel entonces tenía una novia prácticamente IGUAL a Maho. Era increíble el parecido (por más friki y tonto que suene xD).
En fin…buena reseña. Espero la próxima!
Saludos.
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Después de leer el manga de Nana (que por más que sea romántico ahonda en el tema de la fama y la música más que en el anime) tenía ganas de ver una serie musical no moe. Gracias por la recomendación!
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Apuntadisimo a la lista para disfrutarlo 😀
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Ni manera de haberlo dicho mejor: realidad, personalidad y naturalidad. Sé que mi opinión no es tan objetiva al ser un fiel seguidor del rock independiente pero este anime en particular te hace valorar ese gran esfuerzo que hay en las industrias de bajo perfil y no sólo en la músical.
Recomendadísimo para cualquiera con 2 piscas de amor por la música y también para los que aún sólo disfrutan de ella.
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